por Orlando Jorge Mera
orlandojorgemera@yahoo.com
Caso “Lava Jato”
El caso “Lava Jato” (“lavado de autos”), el mayor escándalo de corrupción gubernamental en Brasil que involucra a Petrobras y a centenares de dirigentes políticos y empresariales, salpica y sin sorpresa, en República Dominicana, en donde abundan las obras de infraestructura llevadas a cabo por la empresa Odebrecht, que curiosamente se adjudica la mayoría de los contratos de las megaobras, algunas con ofertas muy por encima de las otras licitaciones y con detalles de gastos nada convincentes.
Hace tiempo venían corriendo rumores de las implicancias de la empresa brasileña en casos de corrupción. La detención de Marcelo Odebrecht, presidente de la constructora, fue la voz de alarma final para que los peores fantasmas de la corrupción estatal al más alto nivel volvieran a flotar en nuestro país.
Precisamente, una revista brasileña llamada Época, publicó en abril pasado, que el expresidente de Brasil, Lula da Silva, viajó al país financiado por Odebrecht, donde fue recibido por el presidente Medina, con el propósito de gestionar nuevos contratos a favor de la empresa, rumor que se afianzó cuando tres meses más tarde el Gobierno Dominicano anunció la licitación para la construcción de una central termoeléctrica en Punta Catalina, concurso que obtuvo la empresa brasileña sin importar que su oferta doblara en costo a la segunda mejor propuesta.
De su lado y como de costumbre, el Congreso Nacional aprobó un préstamo del Banco de Desenvolvimiento Económico y Social (BNDES) de Brasil por un monto de 656 millones de dólares, recursos que eran necesarios para proseguir con un contrato que ha sido fuertemente cuestionado por otras empresas que participaron en la licitación.
En medio de estos hechos, el presidente Medina recibió hace unos días al canciller de Brasil, Mauro Vieira, y aunque no se hicieron públicos los temas tratados, es más que evidente que el escándalo de corrupción fue el tópico central. Incluso, es muy probable que la visita haya estado vinculada al hecho de que las investigaciones de Brasil se extenderán al territorio dominicano.
Por eso, el Partido Revolucionario Moderno (PRM), junto a otros partidos y movimientos, depositamos formal petición ante la Procuraduría General de la República para que investigue los contratos de Odebrecht en el país, y se esclarezcan cuanto antes el origen y destino de los recursos de contratos oscuros, todo en un escenario donde la reelección pasó de ser rechazada a un principio fundamental de partidos y políticos que no parecen tener memoria.
http://elnacional.com.do/caso-lava-jato/
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