@ADOCCO Una pregunta interesante para los empresarios que abogan tanto por el cumplimiento de la ley #DondeEstanLosMillones

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— ADOCCO (@ADOCCO) 17 de noviembre de 2016

Editorial jueves, 17 de noviembre de 2016
¿Dónde están los $9.6 mil millones?
Si las cotizaciones de los empleados públicos a la seguridad social son religiosamente descontadas por las instituciones en las que éstos trabajan, nada justifica que esos dineros no lleguen a su destino, que es la Tesorería de la Seguridad Social, como irregularmente ha estado ocurriendo.
Los retrasos montan 9,600 millones de pesos, y vienen de viejo. La pregunta obligada es: ¿Qué se hizo con ese dinero, dónde fue a parar?
Y obviamente que a la sociedad, pero sobre todo a los empleados que son afiliados de la seguridad social, de cuyos salarios han sido descontadas, mes por mes, las aportaciones que garantizan las coberturas de atención, hay que rendirles cuentas claras.
Esta es una anomalía de fondo, que no puede persistir ni ser permitida. Primero, es un incumplimiento de la ley que se penaliza, inclusive, con recargos del 5 por ciento mensual de la suma de cotizaciones retenidas.
Pero si la práctica consuetudinaria de unas 195 instituciones públicas es la de acumular más de 60 meses sin pagar, pocas esperanzas se tienen de que, además, honren los recargos.
Y segundo, es un atentado a la salud de los afiliados, ya que los deja desprotegidos y sin posibilidades de usar sus prerrogativas a la hora de procurar atenciones médicas o recibir compensaciones por riesgos laborales.
Estamos en presencia de una gravísima falta, de una práctica que entraña irregularidad en el manejo de fondos públicos no sujetos, aparentemente, a una rigurosa comprobación, ni de su uso real ni de su destino final, lo que pone en entredicho la confiabilidad del mecanismo, máxime cuando los retrasos ascienden a casi 10 mil millones de pesos, una suma respetable.
Es preciso que el Presidente de la República, que actuó con firmeza y prontitud al conocer que centenares de funcionarios se estaban burlando de la ley de declaración jurada de patrimonio, conminándolos a cumplir so pena de no cobrar o ser destituidos, disponga una investigación para esclarecer este escamoteo inexplicable e injustificable a los dineros que garantizan la protección de la salud, la vejez o el retiro, a sus empleados afiliados en la seguridad social.
http://www.listindiario.com/editorial/2016/11/17/443499/donde-estan-los-9-6-mil-millones