Naciones Unidas conmemora este viernes el Día de la Desigualdad Social. Conmemora porque de celebrar no hay nada. El mundo vive una tendencia peligrosa: los ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres. República Dominicana no escapa a esta realidad: cuatro de 10 dominicanos vive en la pobreza y pobreza extrema.
Hoy somos más pobres que hace 15 años, y a las puertas del plazo para cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), el fracaso es total. De esperar reducir la pobreza extrema al 5.4%, recibimos el año con el 8.4%; 840 mil dominicanas y dominicanos viviendo con menos de un dólar al día.
El desempleo, de la mano con la pobreza, sigue en niveles que destruyen sueños y anhelos de familias. La tasa llega al 15%, y si de jóvenes hablamos esta roza el 30%. Ambas son muy superiores al promedio regional, enterrando aquella falsa percepción de que nuestra economía estaba blindada.
Las cifras anteriores parecen increíbles para un país que en los últimos diez años ha crecido como pocos de América Latina. Solo en 2014, la economía creció 7.1%. La pregunta entonces es¿dónde están esos recursos? ¿Por qué cuatro millones de dominicanos siguen en la pobreza y por qué 30 de cada 100 jóvenes no tiene empleo? El modelo está agotado, el rumbo equivocado.
Por eso trabajamos sin descanso por la justicia social, para garantizar una justa distribución de las riquezas que genera el país, la inversión de capital para retribución de todos y no para unos pocos, y así garantizar el fortalecimiento de la democracia, hoy maltrecha por 10 años ininterrumpidos de un PLD más corporación que partido, arropado por la corrupción y la impunidad, emborrachado por el poder y completamente ajeno al presente de la República Dominicana. Esta decepción la transformaremos en esperanza, y esa esperanza la transformaremos en prosperidad. Lo lograremos.
http://elnacional.com.do/desigualdad-blindada/
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