Pércival Matos
Muerte de Pércival Matos se convierte en bumerán contra el gobierno
Por Robert Vargas
La muerte por al menos 37 balazos del ex oficial del Ejército Nacional John Pércival Matos, que fue presentada en principio como una “victoria” del Gobierno contra la criminalidad, tiende a convertirse rápidamente en un bumerán que amenaza con golpear la maltrecha credibilidad gubernamental.
La muerte por al menos 37 balazos del ex oficial del Ejército Nacional John Pércival Matos, que fue presentada en principio como una “victoria” del Gobierno contra la criminalidad, tiende a convertirse rápidamente en un bumerán que amenaza con golpear la maltrecha credibilidad gubernamental.
De manera creciente, en las redes sociales crecen de forma permanente los pronunciamientos de ciudadanos que están convencidos de que Pércival Matos fue ejecutado, a pesar de que el mismo pudo ser arrestado y llevado a los tribunales para que respondiera por las imputaciones en su contra.
La versión del reputado patólogo Sergio Sarita Valdéz de que el cadáver tiene señales visibles de disparos a quemarropa se convierte en algo así como un puñetazo en plena nariz del gobierno.
El principal responsable de la creación de la imagen del Gobierno, Roberto Rodríguez Marchena, le informó al país desde el Palacio Nacional, que Pércival Matos murió en “un enfrentamiento” con las fuerzas de seguridad.
Sin embargo, lo dicho por Sarita apunta a que, en realidad, se ha tratado de una ejecución sumaria y luego realizada una probable puesta en escena para generar la percepción de que hubo un “intercambio de disparos”.
No contaban esos estrategas con que alguien en el lugar del hecho grabaría el “intercambio de disparos” con un teléfono celular en el que se comprobó que los disparos iban en una sola dirección.
Además, durante mucho tiempo se creó la percepción de que Pércival Matos era un tipo despiadado y sin ideología al que había que eliminar cuanto antes, estrategia que logró hacer que mucha gente reclamara sangre cuantos antes.
A pesar de esto, una mirada a lo que él publicaba en su muro de FaceBook revela que él tenían un punto de vista político e ideológico y que estaba claramente opuesto al gobierno de Danilo Medina.
O sea, ahora parece que Pércival Matos era un enemigo político del gobierno que se dedicó a perpetrar asaltos a bancos con fines aún no claros.
En ese ambiente, el dedo acusador tiende a cambiar de dirección y el ex oficial comienza a ser percibido por muchos no como un victimario, sino como una víctima.
En este cambio de percepción, las redes sociales juegan un papel importante puesto que todo el mundo puede decir su verdad sin intermediarios.
Uno de los agravantes es que ahora el Palacio Nacional, que protege a presuntos o reales corruptos, ha comenzado a ser visto en las redes como sanguinario y criminal, capaz de ordenar la ejecución sumaria de potenciales adversarios, aún sea poniendo escena supuestos tiroteos.
http://ciudadoriental.com/percival-matos-bumeran-gobierno/
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