Agenda Global
Por José Alejandro Ayuso
La revolución ética
“Nosotros estamos haciendo todo lo indecible para hacer un gobierno transparente y creo que lo estamos logrando…” contestó el presidente Danilo Medina a los directores de medios de comunicación impresos, con quienes se reunió el pasado miércoles en el Palacio Nacional. Consta que lo dicho por el primer mandatario está avalado en hechos reales y realizaciones concretas que, si bien no se pueden ocultar, en ocasiones resultan de difícil discernimiento para la ciudadanía que paga sus impuestos y exige un correcto uso y una gestión responsable de los fondos públicos.
En especial, para esa clase media profesional y empresarial que cumple con el deber constitucional de tributar al Estado, que por principio prefiere no depender del mismo pero sí que éste mejore la calidad de los servicios públicos, y que quizá no engrosa la nómina de proveedores del Estado que, cuando este gobierno tomó las riendas era de un poco más de 19 mil suplidores y a agosto de 2015 era de 57,525. Es decir que en la gestión de Medina esa lista aumentó en 38 mil 525 nuevos proveedores de bienes y servicios que hacen buenos negocios con la administración del Estado.
En su discurso ante la Fundación Institucionalidad y Justicia, Inc. (Finjus) el pasado 23 de noviembre, el presidente Medina explicó en detalle la transformación radical en las cuatro áreas del Estado que “constituyen su corazón administrativo y financiero” para “garantizar el correcto uso de los recursos públicos”. En concreto se refería al área de Presupuesto Nacional, a la Dirección de Compras y Contrataciones, a la Tesorería Nacional y a la Contraloría General de la República y admitía que “soy consciente de que estos cambios no son siempre visibles a toda la ciudadanía, pero su repercusión en el funcionamiento transparente y eficiente de la administración es inmensa”.
Una muestra que está en boga por el manejo politiquero que la oposición le está dando al mismo es el presupuesto anual, cuyos detalles de cómo y en qué se emplean los recursos del Estado, explicados con un lenguaje sencillo y comprensible que lo pone al alcance de la gente, se encuentran en la página web de la Digepres bajo la iniciativa de “Presupuesto Ciudadano”. Este esfuerzo de transparencia se tergiversa para fines electoreros, lo que desacredita al candidato opositor que presenta números y partidas que no se corresponden con la verdad, como ya se ha evidenciado.
En su discurso de lanzamiento como candidato el presidente Medina, avalado por estas perceptibles transformaciones institucionales y su incuestionable ejemplo de integridad y honestidad personales, afirmó que lidera una “permanente cruzada ética” para luchar contra la corrupción que, aclaró y está en lo correcto, ni es un “defecto exclusivo de un país, de un partido o de un determinado grupo social”.
Como también advirtió que “es necesaria la acción permanente de todos los poderes y de toda la sociedad”, me permito convocar a esa clase media reclamante y escéptica de la política a seguir el liderazgo del Presidente Medina para que, en los cuatro próximos años, “promovamos juntos una revolución ética, moralizadora y modernizadora”. Jóvenes estudiantes y profesionales, pequeños y medianos empresarios, únanse a esta revolución que también será social y tecnológica para seguir transitando senderos de paz, equidad y bienestar para todos.
http://elnacional.com.do/agenda-global-266/
20 de febrero de 2016. SANTO DOMINGO
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