Ryan pacifica el Capitolio con un presupuesto de consenso
El texto, que cuenta con el apoyo de republicanos y demócratas, cierra una época de batallas fiscales agónicas en el Congreso
El Congreso de EE UU aprobó ayer un presupuesto que aumenta el gasto federal y recorta impuestos para las clases medias y las empresas. El presupuesto, aprobado con el consenso de la mayoría republicana y de los demócratas del presidente Barack Obama, pone fin a años de peleas partidistas. Es mérito, en parte, del nuevo presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, elegido en octubre tras la dimisión por sorpresa de John Boehner.
Ryan, respetado por la correosa facción derechista del Tea Party y con una experiencia legislativa y unos modales respetuosos que lo acercan al establishment, ha puesto paz a un órgano que concentra todos los males de Washington. Cuando los republicanos conquistaron la mayoría de la Cámara de Representantes, en 2010, la parálisis se instaló en Washington y el margen de Obama para gobernar quedó drásticamente reducido.
El presupuesto contempla 1,14 billones de dólares (1,05 billones de euros) de gasto en 2016 y rebajas de impuestos de 680.000 millones en la próxima década. La Cámara de Representantes lo aprobó con 316 votos a favor —republicanos y demócratas— y 113 en contra. En el Senado, 65 legisladores votaron a favor y 33 en contra, entre ellos Bernie Sanders, candidato izquierdista a la nominación del Partido Demócrata para las presidenciales. Fue llamativa la ausencia del senador Marco Rubio, aspirante a la nominación del Partido Republicano, que como la mayoría de candidatos de su partido basa su campaña en el rechazo a las componendas de Washington.
Componendas
El presupuesto puede calificarse de componenda que confirma todas las sospechas de los populistas sobre Washington, o de obra maestra del consenso. La mayoría republicana logra acabar con la prohibición de exportar petróleo, además de un aumento del gasto militar. La minoría demócrata frustra los intentos de limitar la entrada de refugiados sirios o de eliminar la financiación pública para organizaciones de planificación familiar.
Que el presupuesto, y el papel de Ryan en el Capitolio, acaben definitivamente con los bloqueos de los últimos años, es otra. Posiblemente no se repitan las agónicas negociaciones para evitar el cierre de la Administración federal o la suspensión de pagos de EE UU, como ha ocurrido en los años de Obama. Pero las diferencias ideológicas son enormes y esto dificultará la aprobación de leyes de calado al estilo de la reforma migratoria.
El Congreso de Estados Unidos aprobó este viernes un acuerdo presupuestario para dotar de fondos al Gobierno Federal durante el año fiscal 2016, que suma 1,15 billones de dólares para los próximos 10 meses.
Tras semanas de negociaciones, republicanos y demócratas llegaron a un acuerdo sobre el paquete de financiación, que fue aprobado hoy primero por la Cámara de Representantes y después por el Senado con una amplia mayoría en ambos hemiciclos.
El texto presupuestario contempla el levantamiento de la prohibición de exportaciones de petróleo, una demanda de los republicanos, mientras que los demócratas consiguieron incluir estímulos para el fomento de energías limpias y la reducción de costes de los seguros médicos. http://internacional.elpais.com/internacional/2015/12/18/estados_unidos/1450458694_307208.html
No hay comentarios.:
Publicar un comentario