viernes, 4 de marzo de 2022

Isla de dos repúblicas | Este documental posee un alto valor como documento histórico, pues define objetivamente el origen del nacimiento de las dos naciones

CRÍTICAS DE CINE

Isla de dos repúblicas

Este documental posee un alto valor como documento histórico, pues define objetivamente el origen del nacimiento de las dos naciones

Título original: Isla de dos repúblicas. Año: 2022. Género: Documental. País: República Dominicana. Dirección: Héctor Ulises Montás. Guion: Frank Moya Pons, Rey Andújar. Elenco: Fabián Toro (Voz). Duración: 1 hora 30 minutos

Uno de estos puntos es el tema ambiental, pero con las ramificaciones sociales y políticas que el mismo fondo conlleva. Trabajos recientes como “Muerte por mil cortes” (Juan Mejía Botero y Jake Kheel, 2016) “La isla de plástico” (José María Cabral, 2020) y “El naturalista isleño” (Eladio Fernández, 2021) han ofrecido distintas perspectivas sobre la condición de la isla en términos de la conservación de sus recursos naturales.

Héctor Ulises Montás, productor y realizador, parte de este convencimiento y apoyándose del texto escrito por el historiador Frank Moya Pons y en la supervisión en el guion del escritor Rey Andújar, ofrece con “Isla de dos repúblicas” el más certero documento audiovisual sobre el conocimiento a través de hechos históricos y el tema ecológico, del espacio insular que comparten la República Dominicana y Haití.

A través de una narrativa que recae en la voz de Fabián Toro (voiceover Discovery) este documental posee un alto valor como documento histórico, pues define objetivamente el origen del nacimiento de las dos naciones y el vínculo que se ha forjado a través del tiempo, desde la colonización hasta el período actual.

Su producción, altamente cuidada en su aspecto estético, es determinada por el trabajo fotográfico de Leopoldo J. Tamargo, Frankie Báez, Jaime Gómez, Claudio Chea y Alex Otero y el trabajo en la partitura de Pengbian Sang y Su Chang Sang, quienes realzan un aspecto visual y musical importante a través de un nivel profesional con estándar internacional.

Ulises Montás interpreta el texto de Moya Pons de una manera significativa ofreciendo un trabajo de aspectos narrativos importantes, donde el relato histórico se fusiona adecuadamente con la envoltura ecológica y problemática ambiental que presenta la República Dominicana con respecto a la república de Haití.

De esta manera se hace énfasis en monumentos importantes de la historia haitiana como la Ciudadela de Laferrière, una fortaleza sobre una montaña, y las ruinas circundantes del palacio de Sanssouci, pero también en la muestra de uno de los asentamientos informales más grande del hemisferio, la Cité Soleil, una comuna extremadamente pobre y densamente poblada, ubicada en el área metropolitana de Puerto Príncipe. Referencias idóneas para entender el contexto de la visión como nación que posee Haití.

Así, la República Dominicana con su belleza natural, pero también con sus problemas ambientales se muestra como el lado convexo de la otra parte de la isla. No obstante, con un vínculo perdurable que somete a buscar soluciones conjuntas para equilibrar los procesos de desarrollo social y económico.

“Isla de dos repúblicas” viene a afianzar esa preocupación de exploración de los reductos históricos y de fortalecer ese catálogo de documentales que vienen a posicionar aún más el compromiso de los realizadores, en este caso de Ulises Montás, sobre el aspecto social de su oficio y en la contribución a arrojar luces con respecto a la problemática ambiental, pero también a la historia social de la isla.

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