Compromiso del PRM
El día de la convención interna del PRM, el próximo domingo 18 de febrero, la gran “masa silente” de la sociedad dominicana no estará tan pendiente del nombre y la filiación interna del nuevo presidente y el secretario general de la organización, sino de si el partido quedó bien y unificado.
Y es que el valor estratégico del actual proceso de renovación de la dirigencia del partido es que se percibe como un paso correcto para constituirse en la opción de los dominicanos para el cambio político en el año 2020.
Nada más importante, en tiempos de acoso y socavamiento del sistema de partidos políticos y de quiebra de la independencia del poder judicial y las altas cortes.
Ponerle fin a ese peligroso despeñadero requiere una oposición política bien organizada y comprometida con los valores democráticos y el bienestar del pueblo dominicano.
El PLD ya no cree en esos valores; la gran fortuna económica de que disfrutan sus líderes, succionada del erario, y la concentración de poderes en sus manos han transfigurado su cúpula en ciudadanos para quienes los principios éticos son asuntos menores, utopías de un Juan Bosch romántico que “no entendía la política real” dominicana. “¡”Son otros tiempos!”, dicen, como si el no robar, por ejemplo, fuese un valor que se practica por temporada, a veces.
(Siempre que reflexiono sobre la profunda metamorfosis del peledeismo en contraste con la predica y praxis de Bosch, me viene a la cabeza un párrafo de Balzac en su insuperable novela Las Ilusiones Perdidas, al referirse a la esperanza ingenua de la hermana de Luciano el día que éste, gracias a su talento literario, ascendía de la marginalidad económica a la cumbre social de Angulema, su ciudad; Balzac dice de la hermana ilusionada lo siguiente: “La santa criatura ignoraba que, cuando empieza la ambición, cesan los sentimientos sencillos y desinteresados”).
Y se ha cumplido. Capturado por la ambición desmedida, el PLD ha puesto a un lado los “sentimientos sencillos” y ha pasado de ser una prometedora esperanza política a la condición de gran retranca para el desarrollo institucional, social y económico del país.
Ejemplos: el Congreso y el Poder Ejecutivo, bajo control absoluto del PLD, se niegan aprobar la ley de partidos políticos y una nueva ley electoral; manipulan y desfiguran el pacto eléctrico, evaden aprobar cualquier normativa que elimine el despilfarro en el gasto público, no persiguen la corrupción desbocada, no aplican la ley de control de la inmigración ilegal a territorio nacional y carecen de una estrategia para controlar los crímenes contra ciudadanos en la calles y en sus hogares.
La salida urgente es el cambio político.
Para cumplir con esas expectativas de interés nacional, el PRM deberá fortalecer su unidad interna, movilizar una gran participación de sus militantes en la convención del próximo 18 de febrero y seguir preparándose para las grandes luchas futuras.
https://acento.com.do/2018/opinion/8534482-compromiso-del-prm/
Antonio Almonte / Detalles
Actual Director Ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía del PRM. Graduado en física y en ingeniería nuclear (Madrid y Londres).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario