Si los resultados cuentan para algo: Benjamín Netanyahu volverá a ser el próximo primer ministro de Israel, al frente de un Gobierno que esperemos que sea más estable que los tres anteriores y efímeros gobiernos de coalición que formó tras las elecciones celebradas en abril de 2019, septiembre de 2019 y marzo de 2020.
Netanyahu ha dicho a los votantes:
“Me comprometí a cuidar de los ciudadanos de Israel y lo hago con una profunda misión. Traje vacunas y cuatro acuerdos de paz, hay cuatro más en camino”.
No se trata del desvarío autopromocional de un político desesperado que busca la reelección, sino de una descripción precisa de lo que Netanyahu ha hecho personalmente para proteger la salud, la seguridad y la protección de todos los ciudadanos israelíes -judíos y árabes-, independientemente de sus creencias políticas o religiosas.
Sigal Atzmon -fundador y director general de Medix Global- ha elogiado el exitoso programa de vacunas de Israel:
“En primer lugar, el programa de vacunas de Israel es la envidia del mundo. Hasta el 14 de marzo, el 59,7% de los 9,3 millones de habitantes habían recibido al menos una dosis de la vacuna BioNTech de Pfizer. En segundo lugar, el éxito del despliegue significa que Israel tiene la suficiente confianza para empezar a reabrir su economía de nuevo. Los ciudadanos que hayan recibido ambas vacunas, o que se hayan recuperado del COVID-19, pueden descargar una aplicación desarrollada por el Ministerio de Sanidad. Esto les da un código QR único, que dura seis meses. Al escanearlo, los ciudadanos pueden acceder a gimnasios, teatros, restaurantes y bares. También está ayudando a fomentar una mayor aceptación de la vacuna”.
El director general de Pfizer -Albert Bourla- reveló la implicación personal de Netanyahu en la consecución de este espectacular resultado en este artículo de Bloomberg:
“Pfizer Inc. eligió a Israel para un estudio de vacunación contra el virus Covid-19 a nivel nacional, suministrando suficientes vacunas para inocular rápidamente a toda la población elegible, después de docenas de llamadas telefónicas de su primer ministro, a veces en medio de la noche”.
El tamaño relativamente pequeño del país y los registros sanitarios electrónicos que cubren a más del 99% de los residentes fueron dos razones importantes para situar el estudio en Israel, dijo el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, en una entrevista concedida a última hora del jueves al canal 12 de noticias de Israel. Pero lo que inclinó la balanza a favor de Israel fue la persistencia del Primer Ministro Benjamin Netanyahu, que Bourla calificó de “obsesión”.
“Me llamó 30 veces”, dijo Bourla. “Me preguntaba por las variantes, por los datos que tenemos. Y yo le decía: ‘Primer Ministro, son las tres’. Y él decía: ‘No, no, no te preocupes, dímelo’. O me llamaba para preguntarme por los niños, ‘Tengo que vacunar a las escuelas’. O para preguntar por las mujeres embarazadas. Así que me convenció, francamente, de que estaría al tanto”.
En cuanto a la promoción de la seguridad personal de todos los ciudadanos israelíes, Netanyahu ha supervisado:
– Que los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Bahréin, Sudán y Marruecos establezcan relaciones diplomáticas con Israel en virtud de los Acuerdos de Abraham.
– El establecimiento de una embajada en Jerusalem por parte de Kosovo, uno de los pocos países musulmanes de Europa.
– Los EAU anuncian la creación de un fondo de 10.000 millones de dólares para invertir en Israel.
– Decenas de miles de israelíes visitando Dubái
– Varios países árabes más, al parecer, están a punto de unirse a los Acuerdos de Abraham, entre ellos Omán, Qatar y Mauritania.
– La normalización entre Arabia Saudita e Israel, que ha comenzado con la concesión por parte de Arabia Saudí de derechos de sobrevuelo a Israel y, más recientemente, la autorización para que un equipo de carreras israelí participe en el Rally Dakar.
– La oferta de Gaza, el 70% de Cisjordania y zonas del territorio soberano de Israel a la Organización para la Liberación de Palestina para la creación de un segundo Estado árabe -además de Jordania- en el territorio que antes constituía la Palestina obligatoria.
Los denigradores y detractores que impugnan la reelección de Netanyahu se enfrentan a una ardua batalla.
David Singer es un abogado australiano que participa activamente en organizaciones comunitarias sionistas de ese país. Fundó el Comité “Jordania es Palestina” en 1979.