¿Vivimos una época de desencanto?: Erudito estadounidense Noam Chomsky, su respuesta más vigente que nunca
A la pregunta si ¿Vivimos una época de desencanto?, el filósofo, lingüista, politólogo y activista Noam Chomsky, respondió hace casi dos años para el diario El País, la realidad más vigente que nunca. A continuación algunas de las preguntas:
Hace ya 40 años que el neoliberalismo, de la mano de Ronald Reagan y Margaret Thatcher, asaltó el mundo. Y eso ha tenido un efecto. La concentración aguda de riqueza en manos privadas ha venido acompañada de una pérdida del poder de la población general. La gente se percibe menos representada y lleva una vida precaria con trabajos cada vez peores. El resultado es una mezcla de enfado, miedo y escapismo. Ya no se confía ni en los mismos hechos. Hay quien le llama populismo, pero en realidad es descrédito de las instituciones.
Continúan la entrevista con la pregunta ¿Y así surgen las fake news (noticias falsas)?
La desilusión con las estructuras institucionales ha conducido a un punto donde la gente ya no cree en los hechos. Si no confías en nadie, por qué tienes que confiar en los hechos. Si nadie hace nada por mí, por qué he de creer en nadie.
¿Ni siquiera en los medios de comunicación?
La mayoría está sirviendo a los intereses de Trump.
Pero los hay muy críticos, como The New York Times, The Washington Post, CNN…
Mire la televisión y las portadas de los diarios. No hay más que Trump, Trump, Trump. Los medios han caído en la estrategia que ha diseñado Trump. Cada día les da un aliciente o una mentira para situarse él bajo los focos y ocupar el centro de atención. Entretanto, el flanco salvaje de los republicanos va desarrollando su política de extrema derecha, recortando derechos de los trabajadores y abandonando la lucha contra el cambio climático, que precisamente es aquello que puede terminar con todos nosotros.
Y en el marco de la realidad política de Estados Unidos en el 2018, le preguntan ¿Ha triunfado entonces el neoliberalismo?
El neoliberalismo existe, pero solo para los pobres. El mercado libre es para ellos, no para nosotros. Esa es la historia del capitalismo. Las grandes corporaciones han emprendido la lucha de clases, son auténticos marxistas, pero con los valores invertidos. Los principios del libre mercado son estupendos para aplicárselos a los pobres, pero a los muy ricos se los protege. Las grandes industrias energéticas reciben subvenciones de cientos de millones de dólares, la economía high-tech se beneficia de las investigaciones públicas de décadas anteriores, las entidades financieras logran ayudas masivas tras hundirse… Todos ellos viven con un seguro: se les considera demasiado grandes para caer y se los rescata si tienen problemas. Al final, los impuestos sirven para subvencionar a estas entidades y con ellas a los ricos y poderosos. Pero además se le dice a la población que el Estado es el problema y se reduce su campo de acción. ¿Y qué ocurre? Su espacio es ocupado por el poder privado y la tiranía de las grandes entidades resulta cada vez mayor.
Suena a Orwell lo que describe.
Hasta Orwell estaría asombrado. Vivimos la ficción de que el mercado es maravilloso porque nos dicen que está compuesto por consumidores informados que adoptan decisiones racionales. Pero basta con poner la televisión y ver los anuncios: ¿buscan informar al consumidor y que tome decisiones racionales? ¿O buscan engañar? Pensemos, por ejemplo, en los anuncios de coches. ¿Ofrecen datos sobre sus características? ¿Presentan informes realizados por entidades independientes? Porque eso sí que generaría consumidores informados capaces de tomar decisiones racionales. En cambio, lo que vemos es un coche volando, pilotado por un actor famoso. Tratan de socavar al mercado. Los negocios no quieren mercados libres, quieren mercados cautivos. De otro modo, colapsarían.
Y ante esta situación, ¿no es demasiado débil la contestación social?
Hay muchos movimientos populares muy activos, pero no se les presta atención porque las élites no quieren que se acepte el hecho de que la democracia puede funcionar. Eso les resulta peligroso. Puede amenazar su poder. Lo mejor es imponer una visión que te dice que el Estado es tu enemigo y que tienes que hacer lo que puedas tú solo.
En recientes declaraciones (Fuente:BBVA): Es el momento de enseñar a los niños a entender el mundo:
Pensadores ante la crisis (Diario El País) | Noam Chomsky: “La prevención no da beneficios. Ahí está el origen de …:
Fuente: Télam. Noam Chomsky: “La supervivencia de la democracia está en juego”. ‘‘Estamos en medio de una confluencia de crisis existenciales…” ”La crisis del deterioro de la democracia, que es el único medio para combatir esta crisis y además las crisis de pandemias”.
El mundo está afrontando la confluencia de tres grandes crisis amenazan la sobrevivencia humana, alerta Chomsky. La única solución es el internacionalismo, la solidaridad y la educación: https://bit.ly/3pGohLV
“No podemos pasar por alto el hecho de que estamos en un momento único de la historia de la humanidad. Los seres humanos han estado en la tierra durante unos cientos de miles de años. Son un milagro asombroso, el resultado de muchos accidentes puros … por primera vez en cuatro mil millones de años en la Tierra, criaturas que pueden reflexionar sobre los tipos de preguntas que estamos discutiendo”…
“Pero mientras la pandemia llega a su fin, no podremos restaurar las bolsas de hielo derretidas que advierten de cambios radicales y altamente destructivos que se avecinan para el medio ambiente….
Explicó que “informado” significa “educado”…
“Significa una sociedad que no sólo es educada sino capaz de deliberar, de interactuar, de hecho globalmente, para avanzar hacia soluciones, nuevamente un problema de democracia a escala internacional…
“Es importante reconocer que esta generación tiene una enorme responsabilidad: es la primera generación en la historia de la humanidad que se enfrenta a la pregunta: ‘¿Sobrevivirá la civilización humana en alguna forma reconocible?’ También es la última generación que enfrentará esta crisis porque, si no lo resolvemos, básicamente la humanidad desaparecerá”.
Chomsky dijo que las tres crisis tienen soluciones. “Conocemos las respuestas a ellos. Están al alcance. Son factibles. Pero no basta con tener el conocimiento, es necesario captar e implementar las oportunidades.