- Ciudadanos explican que su odisea no termina al hacerse la prueba, esta se extiende mientras esperan los resultados
Rodríguez, quien desde las 8:00 de la mañana esperaba en la parte trasera del Laboratorio Nacional, es uno de los muchos ciudadanos que se congregan cada día en esa área con el temor de estar contagiados y propagando el virus a sus allegados.
“Me he cansado de llamar para obtener mis resultados y nada, me dieron el teléfono de la epidemióloga del área y nadie responde. Ahora me dicen que los resultados empiezan a entregarlos a las 2:00 de la tarde, pero estoy aquí desde la mañana sin desayunarme, tuve que inyectarme insulina, cómo uno sobrevive a esta realidad”, explicó
Rodríguez indicó que desde el Ministerio de Defensa lo llaman para realizarle una segunda prueba, aunque aún no le entregan los resultados de la primera.
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Para Octani Montero la situación se complicó aún más, pues luego de esperar por más de quince días sus resultados, desde el Laboratorio le informan que su muestra se extravió y debe volver a realizarse la prueba.
“Supuestamente mi prueba se extravió, yo me la hice el 22 del mes pasado y ya llevo tres viajes para acá y ahora tengo que hacérmela de nuevo”, indicó indignado.
Explicó que está a punto de perder su trabajo, pues aunque no presenta síntomas de coronavirus, su empleador le exige la prueba. “Me hice la prueba por temas laborales pero me siento bien”.
Dificultad de comunicación
“Uno se cansa de llamar aquí y nadie responde”, es una de las quejas que manifiesta Carlos Frías, impaciente al no obtener respuesta ni sus resultados.
“Me hice la prueba el día primero de este mes y luego entre a la página del Salud Pública a ver los resultados y la web no funcionaba, intenté por WhatsApp y cuando por fin me contestaron me dijeron que no entregan resultados por esa vía, que tenía que venir aquí”, señaló Frías
- Las personas se aglomeran cada vez que sale alguien del laboratorio, esperando que sus resultados estén entre el listado. ( )
Otros como José Montero, catalogan la situación en el Laboratorio Nacional como un caos, alegando que algunas personas llegan más tarde y son atendidas de primero porque tienen “cuña”.
“Uno aquí desde las siete haciendo turno y llega otra gente a las diez y a esos lo atienden primero. Tú llamas y el teléfono no lo cogen, el número de WhatsApp que tienen tampoco lo usan y, cuando vienes, te dicen que necesitas una cita, pero cómo la haces si no responden”, afirma Montero.
Yaritza Hernández alega que la persona encargada de revisar la documentación para verificar los resultados supuestamente recibe dinero de algunas personas y gracias a esto son atendidas más rápido.
Una segunda prueba
“Desde el lunes estoy llamando a los laboratorios. El número de contacto de Referencia, donde me realicé la primera prueba, que costó horas largas en el teléfono para la cita, ni siquiera timbra, se cae la llamada o sale un mensaje de “no está disponible”.
A este panorama Julieta (nombre ficticio) se enfrenta para intentar conseguir una cita para la realización de una segunda prueba para detectar si aún tiene el nuevo coronavirus.
Julieta explica que con Amadita y Patrias Riva no obtuvo mejores resultados. En el primero le nunca levantaron la llamada, en el Laboratorio Nacional, corrió con la misma suerte.
“El mismo lunes, luego de horas al teléfono, mi esposo decidió ir personalmente a las oficinas de Referencia y Amadita con la esperanza de hacer cita. La misma respuesta en ambos lugares: sólo vía telefónica”, indica.
Cansada de esta situación Julieta le solicita a su médico una prueba por sangre, esta no la cubre el seguro pero sí hay cupos disponibles, por lo menos en Amadita. “Llamamos y nos dijeron que habían 67 llamadas en espera”.
Al llamar al hospital Plaza de la Salud se enteró que sí hacen la prueba, pero solo a sus pacientes “No reciben pacientes externos para la prueba PCR”, señaló.
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