sábado, 28 de enero de 2017

Salim Ibarra / por Robert Polanco

Robert Polanco
SALIM IBARRA.
Transcurría el segundo lustro de la década del 90, al caer la tarde el encuentro obligado para los estudiantes de derecho de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, era un pequeño colmado que estaba ubicado en la Alma Mater casi esquina Independencia, donde realizábamos una tertulia sobre los temas del momento.
Regularmente entrada la noche, observaba aquel hombre de unos 50 años que se dirigía al pequeño colmado acompañado de dos jóvenes, puse mi atención a esa rutina, porque regularmente uno de ellos andaba con un bate de jugar pelota, supuse para protegerse de cualquier agresión en el trayecto de su casa al colmado.
Así fue como conocí a Salim Ibarra, cuando junto al joven que llevaba el bate, acompañaban al Dr. Julio Ibarra Ríos, al colmado a comprar sus cigarros.
Salím Ibarra, aún cuando tenía la posibilidad de estudiar en las universidades privadas del país, decidió estudiar en la UASD, urgido de un sentimiento social que lo llevó a militar en el Frente Estudiantil Sacialista Democrático, para desde allí, canalizar sus inquietudes sociales y luchar por las conquista de los estudiantes.
Como cualquier estudiante, hizo carrera en el FESD, se sometió al escrutinio de las bases y en una convención Nacional del FESD, gana la postulación a la presidencia de la Federación de Estudiantes Dominicanos, en las elecciones del 1999, proceso en el que es electo vicepresidente y posteriormente ocupó la presidencia , tras la renuncia Williams Martínez.
Nunca vi a Salim claudicar, luchó, defendió los estudiantes, la UASD y el País, desde la presidencia de la FED, quién al cumplir su mandato se graduó y procuró nuevos espacios donde acrecentar su carrera Política.
Ocupó distintas posiciones políticas en su condición de dirigente del Partido Revolucionario Dominicano, del cual era el Director de Asuntos Legales y actual Consultor Jurídico del MIREX.
En pleno ascenso personal, profesional y político le sorprende la muerte, de manera inesperada, a des tiempo, dejando en sus familiares, compañeros, amigos y relacionados un profundo pesar y desconcierto, nos resta pedir al altísimo te acoja en su santa morada y recordarte con la gallardía, firmeza y vehemencia que caracterizó tu corta pero valiosa estadía en este mundo.
Paz a sus restos
https://www.facebook.com/profile.php?id=606490050&hc_ref=NEWSFEED&fref=nf

No hay comentarios.:

Publicar un comentario