Por Guillermo Caram | @guillermocaram
LA ÉTICA GUBERNAMENTAL COMO RESPUESTA
A LA DELINCUENCIA Y LA INSEGURIDAD CIUDADANA
La inseguridad ciudadana está constituyendo el problema con mayor
incidencia en la vida dominicana. Para confirmarlo y ante la percepción
generalizada que no se están reportando y registrando todos los casos
delincuenciales, recurrimos a la ENCUESTA NACIONAL DE HOGARES que levanta la
entidad gubernamental OFICINA NACIONAL DE ESTADÍSTICA, con asesoramiento
internacional.
Lamentablemente, el último informe publicado sobre seguridad ciudadana
por esa oficina corresponde a agosto 2016.
Analizándolo observamos las siguientes conclusiones fundamentales:
·
Tres de cada cuatro dominicanos considera la inseguridad ciudadana como
el problema de mayor incidencia nacional
·
72% de las conversaciones cotidianas giran alrededor de este tema
·
El miedo a la delincuencia aumentó un 8.4% durante el primer periodo de
gobierno del Presidente Medina
·
44% de los ciudadanos dejaron de realizar alguna actividad económica o
social, un 7.8% más que antes de iniciarse el segundo periodo de gobierno del
Presidente Medina.
·
Prácticamente una de cada tres personas han sido víctimas directas,
principalmente atracos y robos
Detener la inseguridad ciudadana requiere actitudes y comportamientos
gubernamentales diferentes a las que se han venido siguiendo hasta ahora,
centradas en el ámbito de sanciones punitivas y represivas, policiales y
judiciales; cuyas instituciones, según las Naciones Unidas, son las más
infiltradas por la corrupción.
El accionar gubernamental presente se materializa a través de operativos
como el lanzamiento de agentes a las calles que no obtienen otro resultado que
desnudar la negligencia previa de las autoridades. Y haciendo creer que
dictando prisiones contra delincuentes se combate la delincuencia,
aparentemente ignorando que nuestras cárceles están sobrepobladas:
sobrepoblación que generan costos elevados.
Los recursos financieros son insuficientes para sostener programas de
regeneración de prisioneros por lo que se termina convirtiendo las cárceles en
focos de consolidación, programación y multiplicación de la delincuencia.
Para combatir efectivamente la delincuencia se requiere un cumplimiento
más riguroso de la ética gubernamental, entendida esta como el conjunto de
actitudes, normas y comportamientos idóneos destinados a promover el desempeño
adecuado de funcionarios públicos. Se requiere asumir la ética y adoptar
profilaxis efectivas ponderando variables hasta ahora ignoradas, partiendo de
testimoniar con el ejemplo comportamientos gubernamentales
inductores de comportamientos adecuados de la ciudadanía.
Para ello el gobierno debería:
·
Cumplir las disposiciones sobre Ética consignadas en la le 41-08 que en
su Título IX un RÉGIMEN DISCIPLINARIO que en el artículo 80 contiene las
siguientes prohibiciones específicas:
·
Hace cumplir el CÓDIGO DE PAUTAS ÉTICAS que el Presidente Medina dispuso
al comenzar su gobierno en el 2012 para ser firmada por sus funcionarios
designados a raíz de su toma de posesión.
(Al respecto sería conveniente que el gobierno informe si mantiene esta
disposición, si la ha olvidado, si la ha hecho firmar por funcionarios
designados posteriormente y que seguimiento le ha dado a los que los firmaron)
·
Frenar la ostentación y detentación de riqueza súbita exigiéndole a sus
funcionarios el cumplimiento estricto de la ley 311-14 sobre declaración de
bienes con sus correspondientes actualizaciones anuales establecidas por
decreto y reglamentariamente.
·
Detener la impunidad a la delincuencia de cuello blanco que excusa la
comisión de delincuencia común, exigiendo a la PGR cumplimientos más serios,
creíbles y convincentes de las obligaciones puestas a su cargo.
·
Convenir calendarios y programas de regeneración con las naciones amigas
que repatrían dominicanos que han cometido delitos en el exterior
·
Adoptar criterios más rigurosos para el reclutamiento y formación de
agentes del orden público, cuidando que los delincuentes no se incorporen a
esas instituciones.
·
Establecer control riguroso en el otorgamiento de permisos de porte y
tenencia de armas mediante un mayor cumplimiento de las leyes vigentes.
8, Revisar la legislación vigente sobre tráfico y consumo de sustancias
·
Desarrollar programas comunitarios para abrir oportunidades formativas,
organizativas y de asistencia técnica y crediticia al establecimiento de
empresas y microempresas especialmente dirigidas la juventud de los barrios
valiéndose para ello de organizaciones sociales: religiosas, deportivas,
culturales, etc.
·
Re orientar la política económica y de gastos públicos vía la adopción
de una economía anti lectiva, de satisfacción de necesidades y generación de
puestos de trabajo, en lugar de la economía especulativa que tenemos hoy;
invirtiendo en proyectos barriales comunitarios que reduzcan el hacinamiento y
promiscuidad en viviendas, mejoren la infraestructura comunitaria y superen las
precariedades de servicios públicos barriales
(Parte importante de esta reorientación lo constituye una mayor equidad
fiscal al tenor de lo dicho por las NNUU: “La corrupción, el soborno, el robo y
el fraude fiscal cuestan ...billones de dólares... al año”, dinero que podría
ser utilizada para financiar iniciativas como las sugeridas en esta
declaración)
Nada de eso se está observando con la prioridad debida en el presente
Se recuerda que el Articulo 7 de la ley 1_12 a la que el gobierno está
obligado por ley a cumplir estas obligaciones al establecerse como Primer Eje
del Desarrollo: “Un Estado...con instituciones que actúan con ética...al
servicio de la seguridad...la gobernabilidad, la convivencia pacífica...”.
Se recuerda además que el objetivo 16 de los Objetivos de Desarrollo
Sostenible adoptados por las NNUU y que el gobierno suscribió se centra en la
promoción de sociedades pacíficas.
Exijámosle al a gobierno que cumpla las leyes y los compromisos
internacionales asumidos en este tema de esencial importancia para la vida y
actividades de los dominicanos.
….
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