miércoles, 24 de enero de 2018

La nueva política | por EDUARDO SANZ LOVATÓN @SanzLovaton

Puntos de vista miércoles, 24 de enero de 2018
La nueva política
EDUARDO SANZ LOVATÓN
Desde hace algunos meses hemos manifestado que el sistema de partidos políticos en República Dominicana agoniza, muere lentamente. En los últimos años este país ha estado inmerso, desafortunadamente, en un volcán que no desborda más que erupciones de corrupción, impunidad, delincuencia y desigualdad.
 Eduardo Sanz Lovatón (Yayo) En la época que estamos transitando toda esa ola de desilusiones va tomando cuerpo en los dominicanos y dominicanas. La difusión de las informaciones a través de las redes sociales, los medios de comunicación, son casi automáticas e instantáneas, y las noticias recorren el mundo con mayor rapidez y facilidad. Claramente la sociedad de hoy no es la misma de ayer, eso no lo podemos ignorar.
Asimismo, los partidos políticos deben transformarse, reinventarse en ideas y en prácticas que puedan responderle de manera satisfactoria a una sociedad que está agotada de convivir en aires de inseguridad e insatisfacciones. Las malas gestiones administrativas por parte del partido de gobierno han burlado la democracia dominicana. Le han entregado el sacrificio de muchos, a unos pocos que además, lo desfalcan.
El futuro de RD nos pertenece, y como vamos no podemos continuar. Si no luchamos decididamente por nuestras aspiraciones y necesidades, nos estaremos convirtiendo en cómplices del engaño estatal y estaremos perpetuando la insensatez de un grupo que ya no oye, no ve y no entiende esta sociedad actual.
El PRM tiene en sus manos una gran oportunidad: Representar con seriedad los intereses de los dominicanos y promover la participación de los mismos para que podamos juntos reactivar la vida democrática que tanto anhelamos. 

  • Merecemos tener mejores condiciones sociales, mejores escuelas, mejores hospitales, empleos y profesionales
  • Merecemos también lograr disminuir la pobreza y contribuir con tantas familias desposeídas, jóvenes sin deportes, niños sin estudios, envejecientes enfermos. 
  • Merecemos presumir nuestro país sin que un escándalo de corrupción nos margine del mundo. Tenemos el compromiso de no apartarnos de las realidades que inundan de miserias nuestras calles y nos están dejando sin espacio.

La nueva política no solo es posible: Es indetenible. Estamos ante nuevos liderazgos que aunque llamamos “nuevos”, no lo son en política. Por “nuevos”, nos referimos frente a la Administración Pública, pues muchos son los años participando en la lucha por una sociedad más equitativa. Se han logrado transmitir mensajes diferentes a los tradicionales, identificando las carencias y las exigencias por parte de los ciudadanos para poder cumplir sus expectativas. Generando nuevamente ilusiones perdidas. La mejor demostración la tenemos en las pasadas elecciones donde resultaron electos los Alcaldes y Diputados más jóvenes, todos del PRM.
Esta generación no surge de la nada. Además de preparación intelectual, lo mejor que tiene es que está también cansada de las falsas promesas y los contrasentidos políticos. Esta generación ha decidido dar pasos definitivos que nos conduzcan finalmente a derrotar el sistema corrupto que ha instalado el PLD desde hace años. Por supuesto, lo anterior no puede lograrse sin combinar la juventud con la madurez y experiencia de los líderes que nos han formado, que continúan aportando al partido y que han servido de ejemplo para muchos a través del tiempo.
Imprescindible es que renovemos con optimismo nuestra cultura política, nuestras estructuras partidarias. Si queremos cambio debemos innovar. La innovación nos permitirá expandir nuestros horizontes y concentrarnos en la realización de nuevas metas. Invertir en lo que realmente convenga al país, no para grupos selectos. Que podamos verdaderamente lograr avances económicos y sociales palpables, no abstractos. Evidentemente, la renovación de ideas debe ir abrazada de principios y valores éticos, seguida de objetivos claros, ejecución y transparencia. Si no modelamos esa forma de hacer política, no seremos opción de poder ni en el 2020, ni después.
La historia nos convoca a que no dejemos pasar otra página en blanco, que redactemos reales esfuerzos por rescatar la fe que mueve nuestra gente. La fe que nos acerca. No le regalemos más antagonistas al pueblo dominicano. Contagiemos de entusiasmo, no de desesperanzas. Animemos a nuestras comunidades e invitémoslas a colaborar. No detengamos el sacrificio que hemos invertido y aprovechemos el momento. 
¡Nos toca!
¡Venceremos!
https://www.listindiario.com/puntos-de-vista/2018/01/24/499928/la-nueva-politica

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