- 5 de noviembre de 2016
Después de conocida la auditoría a la OISOE
Una de las razones por las que la República Dominicana ha estado puntera en informes y listas sobre falta de transparencia, debilidad institucional y corrupción, es la falta de consecuencia ante graves violaciones a leyes y normas de parte de algunos funcionarios públicos.
Por ejemplo, la sociedad dominicana ha estado al tanto de todo cuanto ha ocurrido en la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE). Desde hace decenios, esta entidad estatal ha estado marcada por los escándalos relacionados con hechos de corrupción y enriquecimiento ilícito.
Los acontecimientos más recientes, que generaron indignación popular y el reclamo para que la OISOE fuera eliminada, datan del año 2015, cuando el arquitecto David Rodríguez García se suicidó en un baño de las oficinas de la dependencia gubernamental, dejando una nota en la que denunciaba que fue víctima de estafa y extorsión de parte de funcionarios.
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La Procuraduría Especial de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA) abrió una investigación que incluyó a varios sospechosos. Después de más de un año, fueron enviados a juicio de fondo los ciudadanos Alejandro de los Santos y Yoel Soriano Fabián, Julio Rafael Pérez Alejo y Juan Ernesto Romero Pérez, acusados de constituir una organización que presuntamente se dedicaba a la extorsión de contratistas de la OISOE.
Quien fuera director de la OISOE al momento del suicidio del arquitecto David Rodríguez García, el arquitecto Miguel Pimentel Kareh, aunque fue interrogado, finalmente no fue incluido en el expediente acusatorio.
Ante preguntas de los periodistas, la Procuradora del PEPCA, Laura Guerrero Pelletier, dijo que dentro del expediente abierto por el caso de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE) no es posible involucrar a su exdirector, Miguel Pimentel Kareh, debido a que se trata de “un hecho departamental”.
La funcionaria del Ministerio Pública argumentó que se trata de hechos en los cuales incurrieron miembros del departamento de asuntos escolares, y no “toda la directiva” de la OISOE al momento de ocurrir la tragedia del arquitecto David Rodríguez García.
Por otro lado, el pasado jueves se dio a conocer una auditoría practicada por la Cámara de Cuentas de la República Dominicana a la gestión en OISOE de Miguel Pimentel Kareh. La auditoría se dedicó, sobre todo, a los trabajos de reparación y equipamiento del Hospital Docente Universitario Dr. Darío Contreras.
La auditoría, según exponen los especialistas de la CCRD, arrojó irregularidades como pagos de millones de pesos sin evidencia de los detalles correspondientes, rehabilitación de áreas sin evidencias de la aprobación por el Ministerio de Salud Pública y partidas con volúmenes cubicados no ejecutados, entre otras anomalías.
El informe legal elaborado por la Cámara de Cuentas de la República Dominicana, entre el primero de enero de 2013 y el 28 de mayo del 2014, subraya la relación entre la gestión de Pimentel Kareh y el contratista Proyecciones LUXOR, S.R.L, una empresa relacionada a Ferdinando Lamarche Khoury, quien ha tenido vínculos cercanos con el que fuera director de la OISOE.
La pregunta obligada es: ¿No habrá consecuencias? ¿De nuevo será burlada la confianza de la ciudadanía?
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