miércoles, 24 de noviembre de 2021

Biden liberará 50 millones de barriles de petróleo de la Reserva Estratégica


Biden liberará 50 millones de barriles de petróleo de la Reserva Estratégica

Asia/Jerusalem - Mié, 24 Nov 2021 04:12:26 +0200

El presidente Joe Biden anunció el martes la liberación de reservas de petróleo de emergencia para combatir los altos precios de la energía antes de la ajetreada temporada de viajes de vacaciones, pero pasarán semanas antes de que los barriles lleguen al mercado.

El Departamento de Energía liberará 50 millones de barriles de petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo, según la Casa Blanca, la mayor liberación de la reserva en la historia de Estados Unidos, dijo Biden.

Biden señaló el martes que las acciones de la administración “no resolverán el problema de los altos precios de la gasolina de la noche a la mañana”.

“Llevará tiempo, pero antes de que pase mucho tiempo, deberíais ver cómo baja el precio de la gasolina cuando llenáis el depósito”, dijo durante su intervención. “Y a más largo plazo, reduciremos nuestra dependencia del petróleo a medida que cambiemos a la energía limpia”.

El comunicado pretende hacer frente a la falta de suministro de petróleo en todo el mundo, pero su efecto real puede ser limitado. En 2019, el uso de petróleo en Estados Unidos fue de una media de aproximadamente 20,5 millones de barriles de petróleo al día y en 2020 Estados Unidos utilizó de media unos 18,1 millones de barriles al día, según la Administración de Información Energética del Departamento de Energía. La EIA informa que el uso de petróleo fue menor en 2020 debido a la pandemia de Covid-19.

Los barriles de petróleo que se anunciaron el martes no llegarán al mercado hasta “mediados o finales de diciembre, dependiendo de la aceptación del mercado”, según un alto funcionario de la administración.

“Estamos tomando medidas. Gran parte de la razón por la que los estadounidenses se enfrentan a los altos precios de la gasolina es porque los países productores de petróleo y las grandes empresas no han aumentado el suministro de petróleo con la suficiente rapidez para satisfacer la demanda. Y la menor oferta se traduce en un aumento de los precios del petróleo a nivel mundial”, dijo Biden durante sus declaraciones en la Casa Blanca.

Este lanzamiento se hará en coordinación con varios otros países, como China, India, Japón, la República de Corea y el Reino Unido. Los funcionarios creen que el esfuerzo coordinado podría tener un mayor efecto en la reducción de los precios del gas.

Hasta el viernes, había 604,5 millones de barriles de petróleo en la Reserva Estratégica de Petróleo, según el Departamento de Energía.

La medida llega en un momento en que la Casa Blanca se enfrenta a una creciente presión para reducir los precios desorbitados de la gasolina, que están contribuyendo al mayor repunte de la inflación en décadas, lo que ha provocado la frustración y el enfado de los estadounidenses.

El presidente calificó el martes el asunto de “problema” tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo, y subrayó que, aunque los picos de precios suelen ser temporales, “no significa que debamos quedarnos de brazos cruzados y esperar a que los precios bajen por sí solos”.

Treinta y dos millones de barriles se intercambiarán “en los próximos meses”, dijo la Casa Blanca, y esos barriles volverán finalmente a la Reserva Estratégica de Petróleo “en los próximos años”. Dieciocho millones de barriles “serán una aceleración en los próximos meses de una venta de petróleo que el Congreso había autorizado previamente”.

“Los consumidores estadounidenses están sintiendo el impacto de los elevados precios de la gasolina en los surtidores y en las facturas de la calefacción de sus hogares, y las empresas estadounidenses también, porque la oferta de petróleo no ha seguido el ritmo de la demanda a medida que la economía mundial emerge de la pandemia”, dijo la Casa Blanca en un comunicado de prensa. “Por eso, el presidente Biden está utilizando todas las herramientas a su alcance para trabajar para bajar los precios y hacer frente a la falta de suministro”.

El presidente hizo sus declaraciones horas antes de partir para un descanso de Acción de Gracias en Nantucket, frente a la costa de Massachusetts.

En las últimas semanas, Biden había advertido en privado que recurrir a la reserva no serviría de mucho para aliviar los problemas actuales, pero algunos legisladores demócratas argumentaron que podría suponer un alivio temporal en los surtidores. El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, fue uno de los demócratas que lideró la acusación.

A pesar de que se dijo que el impacto podría ser insignificante, la opción de liberar las reservas de petróleo seguía sobre la mesa, dado que Biden tenía pocas otras, y los funcionarios creían que la coordinación con otros países podría tener más efecto. Una de las opciones era aumentar la producción nacional de petróleo, pero la Casa Blanca se ha mostrado cautelosa ante la perspectiva de que el presidente y sus ayudantes impulsen más perforaciones en su país tras la importante cumbre de la ONU sobre el clima COP26, en la que Biden prometió que Estados Unidos “predicaría con el ejemplo” en materia de iniciativas de energía limpia.

La media nacional del precio de la gasolina a partir del martes es de 3,403 dólares, según la AAA, que es significativamente más alta que la media en la misma época del año pasado, cuando mucha gente no conducía ni viajaba tanto debido a la pandemia de Covid-19. No está claro hasta qué punto el esfuerzo de la Casa Blanca afectará inmediatamente a los precios.

En cambio, la medida puede actuar en gran medida como una señal para las naciones de la OPEP y Rusia de que EE.UU. se toma en serio la adopción de medidas para bajar los precios, después de que esas naciones se mostraran reacias a aumentar la producción de petróleo para reducir los precios.

Los funcionarios de Biden han advertido a los saudíes durante semanas que EE.UU. encontraría soluciones alternativas si el precio del crudo superaba los 85 dólares por barril, como ocurrió a finales del mes pasado. Pero Arabia Saudita se ha mantenido firme en su negativa a aumentar la producción y ha valorado -equivocadamente, en opinión de los funcionarios estadounidenses- la posibilidad de que Estados Unidos llegue a un acuerdo nuclear con Irán, dijeron dos funcionarios estadounidenses. La preocupación de los saudíes es que las sanciones impuestas a Irán se reviertan, lo que permitiría al país aumentar su producción de petróleo y competir con la OPEP+.

Dada esa reticencia, el gobierno de Biden consideró la coordinación con las otras naciones como un intento de socavar el control del mercado por parte del cártel.

“El pensamiento ha sido: podemos hacerlo solos o podemos hacerlo a nivel internacional, y esto último sería mucho más efectivo, especialmente cuando se trata de enviar un mensaje a los saudíes”, dijo un alto funcionario involucrado en las discusiones.

Biden también ha tomado otras medidas. La semana pasada, el presidente pidió a la Comisión Federal de Comercio que investigue “inmediatamente” si la actividad ilegal de las compañías petroleras y de gas está haciendo subir los precios de la gasolina. No es probable que esta medida tenga un efecto inmediato en los precios de la gasolina para los consumidores, pero es otro ejemplo de que Biden está tratando de demostrar que está trabajando para bajar los precios. Los hallazgos de la FTC también podrían ayudar a largo plazo si se encuentran irregularidades. El principal grupo de defensa de la industria petrolera criticó esa medida como una “distracción”.

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