El Discurso de Leonel
Lic. Angel Artiles Díaz
27 de agosto de 2018
Lic. Angel Artiles Díaz
27 de agosto de 2018
¿En qué categoría podríamos ubicar la pieza con ribetes de
oratoria pronunciada por el “¿Viejito Explorador”, que responde al alias de
Leonel Fernández?
I. En el escenario de tinte
circense, tuvimos a un político que intentó mostrar lo bueno de un
pasado diseñado por él y que terminó denostando lo amargo de una realidad
propiciada por el partido en el poder, que es a la vez el partido que él preside.
II. Así, podemos decir que el
candidato sempiterno que se tilda a sí mismo de “El León”, habría discursivamente,
tratado de dibujar tres realidades, a partir del uso de palabras básicas del
idioma pobremente entonadas y dentro de un escenario estrafalario:
a) Una autovaloración, con
imágenes literarias muy rusticas, en la que el “Viejito Explorador” trató de
resaltar las obras de relumbrón, de varilla y cemento, realizadas por su
gobierno, sin tocar ni de soslayo los enriquecimientos prohijados a la sombra de
esas construcciones, lo cual no fue necesario, porque la ausencia de Félix
Bautista, Víctor Díaz Rúa y Diandino Peña, mostraban el refajo de ese saqueo a
las arcas públicas;
b) Otra segunda parte, de sutil
valoración negativa a lo que representan las reglas de juego contenidas en
la Ley de partidos políticos, dejando entrever que no la comparte pero que
eventualmente la respetaría, pero que, por lo general, la anomia será la
norma.
c) La tercera y última parte de
la dolorosa pieza oratoria, el “Viejito Explorador” logró la tarea más
sencilla: motivar en sus amanuenses cautivos, los vítores, loas
y aplausos, previamente establecidos en el grotesco guion, para masturbar
su envilecido ego, a partir del uso del lenguaje mal entonado y de escasa expresión
emotiva y de una lista de puentes y carreteras. A esos 3 o 4 mil alelados no
había que motivarlos, ellos fueron debidamente motivados por el deseo incurable
de volver a asirse la de las glándulas mamarias de la teta del Estado.
En fin, la pieza no encaja en
ninguna de las clasificaciones del discurso que hizo Aristóteles, en la
Retórica: No fue apodíctico porque no se refirió a ningún valor moral,
limitándose a utilizar con mucha torpeza las tres más técnicas utilizadas
en los discursos políticos:
1) Trató de crear el
estado de asentimiento, lanzando varias afirmaciones reconocidas como
verdaderas para lograr que la masa endeudada con él lo siguiera asintiendo
también como pollos de granja.
2) Encima de los
asentimientos anteriores, mencionó hechos que pueden o no ser ciertos. Y
comparó, deliberadamente, alcanzar la presidencia con ganar una serie de
baseball, y logró que la masa borregada le aplaudiera delirantemente
3) En lo que sí le fue
bien fue en la tercera técnica: La sugestión. Se valió de mensajes subliminales
para atacar al presidente Danilo Medina en lo personal y denigró sus
ejecutorias.
Pero, el fracaso más
sobresaliente del discurso fue, no poderse referir a la exigua concurrencia,
ahí no había ni el UNO POR CIENTO del cacareado millón.
…..
NOTA: Es obvio que esta opinión es de un seguidor del Presidente
Danilo Medina, contendor del expresidente Leonel Fernández, a lo interno del
Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Observe que en su crítica excluye
los males que los gobiernos de ambos líderes le han ocasionado a la nación.
Robos, impunidad, endeudamiento irresponsable no son tocados en este escrito,
porque sólo luchan por ostentar el poder para beneficios personales y de grupos
corporativos. El pueblo, aquí es el gran ausente, porque pretenden de nuevo
utilizarlo para su creatividad rentista que ha desvencijado la nación. Fuera la
#MafiaMoradaPLD!!! | @LuisOrlandoDia1
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