Psiquiatras del país advierten pobreza y exclusión llevan violencia e inseguridad
La exclusión social, la pobreza, la falta de oportunidades, la violencia, el resentimiento y el desarraigo familiar y social que imperan en el país son responsables del deterioro creciente de la salud mental de un porcentaje significativo de los dominicanos, advirtieron ayer tres psiquiatras y un psicoanalista.
Los especialistas, que participaron en el XVIII Congreso de Psiquiatría, recomendaron al Gobierno invertir más en salud y en mejorar las condiciones de vida de los dominicanos.
Los doctores Vicente Vargas, Secundino Palacio, Delsa Japa y el psicoanalista Julio Castro, coinciden en que la gente dominicana está sumida en una profunda crisis que es necesario superar, comenzando desde el poder, responsable del diseño e implementación de las políticas públicas a favor de la gente. Al ofrecer algunas conclusiones del congreso de psiquiatras, señalaron que el suicidio creciente, la violencia, los trastornos por adicción, desde alcohol a otras drogas, trastornos mentales, son la evidencia del deterioro que afecta a los dominicanos.
El doctor Secundino Palacio asegura que estos problemas ya constituyen un círculo vicioso, pues se da un reciclaje. El estrés tiene que ver con la situación económica y los problemas de tránsito. Es parte del día a día del dominicano.
Deterioro Tanto Palacio como Vargas aseguran que en el país y más en las grandes ciudades existe una gran hostilidad cotidiana, la gente no habla, la familia no se comunica y se gritan en vez de hablar.
“Las calles saturadas de vehículos, el lenguaje corporal y la mirada de la gente en medio del caos son casi de heridas penetrantes”, dijo Palacio, en visita a la redacción de Hoy.
Los médicos dicen que existe un pobre afectividad en los dominicanos, una creciente tendencia al desamor y al cariño que los ha caracterizado.
Los cuatro profesionales aseguran que existe un gran desarraigo y hacinamiento de personas que viven ahora en los barrios, pero que antes tenían un sentido de pertenencia, porque vivían en comunidades rurales donde tenían cerdos, gallinas, su casa y un pedazo de tierra.
Marginalidad, exclusión social, hacinamiento, tráfico de droga en el submundo de la pobreza ayudan a incrementar el embarazo en adolescentes, asegura Vargas, lo que coincide con el análisis de Japa y Castro.
A su juicio, ese escenario genera altos índice de violencia y criminalidad, por parte de personas a las que socialmente se les niega la posibilidad de insertarse, desarrollarse y vivir como seres humanos.
Es hora, coinciden, de que el Gobierno asuma la responsabilidad social que tiene. Se necesita, aseguran, más recursos para la salud, la educación, viviendas y empleos para todos.
http://hoy.com.do/psiquiatras-del-pais-advierten-pobreza-y-exclusion-llevan-violencia-e-inseguridad/
Los especialistas, que participaron en el XVIII Congreso de Psiquiatría, recomendaron al Gobierno invertir más en salud y en mejorar las condiciones de vida de los dominicanos.
Los doctores Vicente Vargas, Secundino Palacio, Delsa Japa y el psicoanalista Julio Castro, coinciden en que la gente dominicana está sumida en una profunda crisis que es necesario superar, comenzando desde el poder, responsable del diseño e implementación de las políticas públicas a favor de la gente. Al ofrecer algunas conclusiones del congreso de psiquiatras, señalaron que el suicidio creciente, la violencia, los trastornos por adicción, desde alcohol a otras drogas, trastornos mentales, son la evidencia del deterioro que afecta a los dominicanos.
El doctor Secundino Palacio asegura que estos problemas ya constituyen un círculo vicioso, pues se da un reciclaje. El estrés tiene que ver con la situación económica y los problemas de tránsito. Es parte del día a día del dominicano.
Deterioro Tanto Palacio como Vargas aseguran que en el país y más en las grandes ciudades existe una gran hostilidad cotidiana, la gente no habla, la familia no se comunica y se gritan en vez de hablar.
“Las calles saturadas de vehículos, el lenguaje corporal y la mirada de la gente en medio del caos son casi de heridas penetrantes”, dijo Palacio, en visita a la redacción de Hoy.
Los médicos dicen que existe un pobre afectividad en los dominicanos, una creciente tendencia al desamor y al cariño que los ha caracterizado.
Los cuatro profesionales aseguran que existe un gran desarraigo y hacinamiento de personas que viven ahora en los barrios, pero que antes tenían un sentido de pertenencia, porque vivían en comunidades rurales donde tenían cerdos, gallinas, su casa y un pedazo de tierra.
Marginalidad, exclusión social, hacinamiento, tráfico de droga en el submundo de la pobreza ayudan a incrementar el embarazo en adolescentes, asegura Vargas, lo que coincide con el análisis de Japa y Castro.
A su juicio, ese escenario genera altos índice de violencia y criminalidad, por parte de personas a las que socialmente se les niega la posibilidad de insertarse, desarrollarse y vivir como seres humanos.
Es hora, coinciden, de que el Gobierno asuma la responsabilidad social que tiene. Se necesita, aseguran, más recursos para la salud, la educación, viviendas y empleos para todos.