En pocos días los norteamericanos celebrarán sus elecciones para la Presidencia de los Estados Unidos. En la historia reciente ese país no había tenido una campaña electoral tan sucia, donde los candidatos han recurrido a temas que creíamos eran el pasado político de países en desarrollo.
Pero para los dominico-americanos y los dominicanos estas son unas elecciones importantísimas, pues se trata de escoger entre dos visiones totalmente diferentes. Una, la de Donald Trump que habla de deportar, construir muros en las fronteras, aislar comercialmente a los EU y pelear.
Otra, la de Hillary Clinton, que habla con el comedimiento de la experiencia, de buscar solución al tema migratorio, y “revisar” los acuerdos de libre comercio existentes, algo, que creo todos los países están pensando, pues el mundo ha dado un gran giro desde cuando se firmaron.
Para los dominicanos, y los dominico-americanos, aquí comienza la diferencia. ¿Queremos más cercanía económica, social y política o no?
Si miramos los “currículum” de ambos, podemos ver que el candidato republicano, no ha dejado nada constructivo en nuestra América Latina que se conozca. Más aún, sus dos visitas a RD sólo resultaron en dañinas para muchas personas que creían en su Imagen.
Desde la Presidencia de los EU, Bill Clinton hace 21 años inició las cumbres de las Américas, donde se reunía con los presidentes de América. Un intercambio que mantuvo durante su período de gobierno. Más aún, fomentó las relaciones entre nuestros países y el intercambio comercial. Fue la época de mayor crecimiento de los Estados Unidos; de menor desempleo y mayor superávit, y esto benefició a cientos de miles de dominicanos residentes en ese país y a sus familiares que recibían con seguridad Sus remesas.
Algunos en nuestro país aluden a su relación con Haití como una preocupación. Clinton tiene mucho cariño por Haití, pasó su luna de miel allí y también cometió errores, como el desmantelamiento de las fuerzas armadas, la única institución que existía, y podía darle coherencia. Siempre he considerado que estos son los motivos, en adición a los sentimientos humanos que todos tenemos, que lo han llevado a hacer un esfuerzo sobrehumano por el desarrollo de ese país, y que comenzó mucho antes del terremoto, y por lo que invitó a muchos de sus amigos dominicanos a invertir en ese país. Los teóricos de las conspiraciones, de los cuales todavía tenemos muchos, hablan de intereses económicos, de un hermano de Hillary, etc.
He tenido oportunidad de acompañar a Clinton en más de una docena de ocasiones en Haití. Siempre me alentó a desarrollar un Punta Cana en Haití que generara miles de empleos para ese pueblo. Lo mismo hizo con otros amigos. Su interés era el desarrollo del país para que su gente no emigrara. Nunca conocí ni vi las inversiones de que se habla, y nadie en Haití me mencionó nada de esto que se especula.
Es bueno notar que a raíz del huracán George, la entonces primera dama, no dudó en venir a República Dominicana, se reunió con todos los sectores, visitó Santo Domingo, San Pedro, La Romana y Punta Cana.
Después de dejar la Casa Blanca, los Clinton han visitado nuestro país 17 veces y han esperado 14 veces el Año Nuevo en Punta Cana.
En estos viajes han conocido a los últimos tres presidentes dominicanos, con quienes ha almorzado en múltiples ocasiones y desarrollando una amistad personal. Lo han hecho con muchas personas de nuestro país con quienes mantienen relaciones de amistad. En otras palabras, sería una presidenta que cuando se mencione nuestro país, lo tendrá bien presente.
Sus relaciones no se limitan a residentes aquí. Es amiga de cientos de dominicanos residentes en Nueva York, Nueva Jersey, Florida y otros estados. Ahora tendremos por vez primera un congresista de origen dominicano en los Estados Unidos, Adriano Espaillat, quien me consta es amigo de Hillary y Bill Clinton. Igual ocurre con otro dominicano, hoy Secretario de Trabajo de los Estados Unidos y posible miembro de un gobierno de Hillary. Hay decenas de dominico-americanos que también tienen una vieja amistad con ella. Sería un gobierno con grandes lazos de amistad con República Dominicana.
Por esto grupos dominico-americanos se han organizado para promover el voto criollo en los Estados Unidos, entre estos están Dominican American with Hillary en la página web http://www.dominicanamericansforhillary.com/index.php y Democrats Abroad a través de la página de instagram #DemsAbroad y #Demdebate.
Creo que los cientos de miles de dominicanos que votan en los Estados Unidos el día 8 deben tomar la decisión que consideren mejor, y hacerlo, no por lo que dicen los fabuladores, sino haciendo un análisis sosegado para tomar en cuenta cuál de los candidatos puede ser mejor presidente para los Estados Unidos, para el mundo, para los inmigrantes y para los dominicanos.
El autor no es americano ni vota en Estados Unidos,
pero conoce a la Familia Clinton desde hace varias décadas.
http://www.listindiario.com/puntos-de-vista/2016/10/29/441030/por-que-hillary-es-mejor-para-los-dominicanos